jueves, 13 de febrero de 2014

Canon.


El canon es una forma de composición musical de carácter polifónico basada en la imitación estricta entre dos o más voces separadas por un intervalo temporal. La primera voz interpreta una melodía y es seguida, a distancia de ciertos compases, por sucesivas voces que la repiten, en algunos casos transformadas en su tonalidad o en otros aspectos.

A la primera voz se le llama propuesta o «antecedente», y a las voces que le siguen respuesta o «consecuente». El canon aportó un gran beneficio al estudio del contrapunto, y, en consecuencia, al desarrollo de las distintas formas musicales.

Motete.


Es una composición vocal, por lo general sobre texto sagrado, e históricamente destinado a interpretarse en los oficios religiosos.
El motete se originó a principios del siglo XIII. Los compositores solían tomar un pasaje florido del canto gregoriano, transcribirlo en notas largas y añadir otras partes vocales encima.
El motete surgió cuando se añadieron palabras (en francés, mots) a las partes vocales superiores. Las características principales del género eran el uso de más de un texto de forma simultánea, a veces en idiomas diferentes, así como la utilización de un segmento de canto gregoriano en la parte vocal más grave.


Fuente: 1. y 2.

Ejemplos de contrapunto.



domingo, 9 de febrero de 2014

Especies de contrapunto

Las especies de contrapunto se denominaron a partir de la observación de la práctica coral e instrumental-que se realizaban por polifonistas europeos-y con su evolución a partir de más de dos voces se construyeron cinco fórmulas:


  • En la primera especie se utilizan únicamente las consonancias siendo perfectas o imperfectas, prestando atención al inicio y al final para dar sentido y resolución al ejercicio.

  • En la segunda especie se utilizan consonancias principalmente en los tiempos fuertes del compás, mientras que en los débiles se prefieren las disonancias, todo salto debe ser consonante melódica y armónicamente. Se prohíbe el salto de sexta mayor.



  • En la tercera especie, con las mismas normas anteriormente mencionadas, se adicionan bordados de preferencia inferiores y escalas. Se evita el uso de arpegios.

  • En la cuarta especie hablamos de los retardos, que deben de estar preparados  por un intervalo de tiempo débil en el compás anterior. Puede resultar disonante pero debe resolverse en una consonancia.
  • En la quinta especie, hablamos de contrapunto florido, en el que se usan todos los recursos antes aprendidos. A demás en los retardos se hace síncopa*. Esta debe de emplearse en valores ritmos iguales, por ejemplo entre blancas, o entre negras.

Fuentes:
1. y 2.